terça-feira, 28 de junho de 2016

Para download: La lucha de clases en el mundo griego antiguo

LINK PARA DOWNLOAD:
http://www.mediafire.com/download/uhndb1ssfuzfdfe/G.E.M.+de+Ste+Croix%2C+La+lucha+de+clases+en+el+mundo+griego+antiguo.pdf

G.E.M. DE STE. CROIX
LA LUCHA DE CLASES EN EL MUNDO GRIEGO ANTIGUO
EDITORIAL CRÍTICA
Grupo editorial Grijalbo
BARCELONA
1988 de la traducción castellana para España y América

"Nuestra pretensión es que el texto de esta obra vaya principalmente dirigido no sólo a los historiadores de la Antigüedad y a los estudiosos de Clásicas, sino también, y en especial, a los historiadores de otros períodos, a los sociólogos, teóricos de la política y estudiosos de Marx, así como al «lector corriente». El uso de textos en griego y de algunos en latín, fuera de algunas breves citas, queda reservado a las notas y apéndices."( Prefacio. G. E. M. S. C., Septiembre de 1980)

segunda-feira, 27 de junho de 2016

Londres fuera de la Unión Europea, no de la OTAN

Por Atilio A. Boron

El triunfo del Brexit en el referendo abre múltiples interrogantes. La mayoría de los analistas, sobre todo en la prensa hegemónica internacional, ha puesto el énfasis en el examen de sus consecuencias sobre los mercados, su exacerbada volatilidad y la cotización de las principales monedas. Sin restarle importancia a este asunto creemos que este énfasis economicista está lejos de apuntar a lo más significativo. Los mercados son entidades veleidosas, siempre sujetos a esa “exuberante irracionalidad” denunciada por Alan Greenspan, el ex jefe de la Reserva Federal de Estados Unidos, de modo que pronosticar su derrotero una vez consumada la salida del Reino Unido de la UE es un ejercicio ocioso y condenado al fracaso, inclusive si las predicciones se hacen para el corto plazo. Mucho más importante es ponderar lo que la decisión del electorado británico significa en términos políticos: un golpe si no mortal pero sin duda muy duro a un proyecto comunitario que cuando adquirió una connotación social y política progresista fue secuestrado, tergiversado y prostituido por la oligarquía financiera europea. Con la deserción de Londres –un divorcio litigioso y no consentido, al decir de algunos- la UE pierde a la segunda economía y al segundo país en población, lo que debilita a una Europa que, con la estructuración supranacional pergeñada por Bruselas, trató de reposicionarse en términos más protagónicos en el turbulento tablero de la política internacional. Si con el Reino Unido en sus filas la UE no era más que un aburrido segundo violín en el concierto de naciones, con los británicos afuera su gravitación global disminuye aún más vis a vis China, Rusia y los nuevos centros de poder internacional. 

No fue casualidad que haya sido Angela Merkel quien mostró la mayor preocupación por el éxodo británico al exhortar a los gobiernos europeos a “mantener la calma y la compostura” ante la mala noticia. Se comprende su actitud: la canciller alemana fue quien con más fuerza impulsó el avance por la senda autodestructiva seguida por la UE en los últimos años. Convirtió al acuerdo pan-europeo en un apéndice de la gran banca, sobre todo alemana; combatió con meticulosidad germana los resabios del proyecto original, que tenía como metas la construcción de una Europa Social y de Ciudadanos; fortaleció a la conservadora burocracia de la Comisión Europea e hizo del Banco Central Europeo (BCE) el perro guardián de la ortodoxia financiera impuesta sin miramientos sobre todos los gobiernos del área. Mientras el neoliberalismo se batía en retirada de América Latina y el Caribe en medio de las ruinas que había dejado a su paso fue la Merkel quien lo revivió en Europa, incorporando al Fondo Monetario Internacional como participante activo en la gestión macroeconómica de los estados y dando origen, junto a la Comisión Europea y el BCE a la infame troika que poco después, como insaciable  plutocracia, se convertiría en el verdadero gobierno de Europa arrojando por la borda cualquier contenido democrático. Los griegos, donde se inventó la democracia, pueden dar fe de la furia destructiva de la troika de la UE, que al caerse la hoja de parra de su hueca palabrería democrática puso en evidencia los alcances de la descomposición del viejo proyecto europeo, atado de pies y manos al servicio del capital.

Esta Europa de las clases dominantes, burocrática y empresarial es la que recibió un mazazo brutal desde el Reino Unido y no hay razón alguna para lamentarse por ello. La UE que acompañó a Washington en todas sus tropelías y todos sus crímenes en el escenario internacional ahora recoge los amargos frutos de su complicidad con los que EEUU perpetrara en Oriente Medio. Era obvio que la destrucción causada en Irak, Libia y ahora Siria provocaría una incontenible marea de refugiados que tienen sólo un lugar adonde dirigirse: Europa. Washington puede alegremente incurrir en tales atrocidades porque está protegido por dos océanos que lo convierten en un destino inalcanzable para quienes huyen del infierno que desata con sus drones, misiles y unidades de combate. Pero Europa, en cambio, está ahí nomás. Y ese torrente humano activó y potenció los peores instintos xenofóbicos y racistas en buena parte de las poblaciones europeas que pretenden, vanamente, ponerse a salvo de las consecuencias de su pasado colonialista y su presente como compinches del imperialismo norteamericano. Por eso la xenofobia fue un componente decisivo del triunfo del Brexit, saludada con euforia por un racista probado y confeso como Donald Trump y los representantes de la derecha en casi toda Europa, con Marine Le Pen a la cabeza. 

No sería de extrañar que lo ocurrido en el Reino Unido precipitara un “efecto dominó” en donde diversos países tengan que someter su permanencia en la UE al veredicto popular. La derecha en Francia y en Holanda ya está hablando de ello, y en otros países ya hay quienes lo están pensando. La crisis puede inclusive tornar inevitable un nuevo plebiscito en Escocia para decidir sobre su permanencia en Gran Bretaña. Los escoceses quieren permanecer en Europa y votaron  en ese sentido en el referendo de días pasados. Uno de los coletazos del Brexit podría llegar a ser una Escocia independiente y la desaparición de la Gran Bretaña tal como hoy la conocemos.

Para concluir: lo bueno de esta situación es que el debilitamiento de la Unión Europea resta fuerzas al imperialismo norteamericano, del cual aquella es su aliada histórica fundamental. Y esta es una gran noticia para los pueblos del mundo que luchan para librarse del yugo de la dominación imperialista. Sin embargo no se debe olvidar que hoy por hoy el pacto atlantista europeo-norteamericano pasa menos por la UE que por la OTAN. Esto es así tanto en el terreno doméstico, habida cuenta de la creciente militarización en la represión de la protesta social en Europa; como en el ámbito internacional, donde el saqueo a otros pueblos reposa cada vez más en la eficacia disuasiva de las armas. Fue por eso que el Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, se apresuró a tranquilizar a sus socios diciendo que la salida británica de la UE no implicaba abandonar la OTAN, de lejos, la más importante expresión del crimen organizado a nivel mundial. Y en tiempos tan convulsionados como estos para la burguesía imperial eso es lo que cuenta. Que Londres pegue un portazo y se retire de la UE es un problema, porque ahora la armonización de políticas entre Estados Unidos y Europa se torna más complicada por la división entre el Reino Unido y los demás países europeos, y las heridas que deja este “divorcio no consentido” entre quienes antes formaban parte de una misma institución supranacional. Pero mucho más grave sería que el electorado británico decidiera salirse de la OTAN, lo que obligaría al imperio a repensar y redefinir su estrategia de guerra a espectro completo a escala global. Por ahora no hay peligro de que tal cosa vaya a ocurrir. Pero el mundo está cambiando muy rápidamente y las sólidas certezas de antaño parecen estar comenzando a volatilizarse.

FUENTE: Rebelión

domingo, 26 de junho de 2016

Brasil e Portugal lançam acervo online de bibliotecas nacionais


Isabela Vieira - Repórter da Agência Brasil - 10/05/2016

Conhecer o acervo da Biblioteca Nacional de Portugal, incluindo originais da Torre do Tombo, que guarda arquivos históricos das navegações e da chegada dos portugueses ao Brasil, em Lisboa, já é possível sem precisar cruzar o Oceano Atlântico.

Por meio de uma parceria com a Biblioteca Nacional, o acervo das duas instituições está sendo digitalizado e colocado à disposição do público na internet. São milhares de títulos dos dois países, incluindo jornais e revistas, que podem ser acessados a qualquer hora do dia, de qualquer lugar do mundo. A expectativa é atrair cerca de 100 mil acessos por mês.


Reprodução da capa da edição de 1572 de Os Lusíadas, de Camões, disponível na íntegra no portal Biblioteca Digital Luso- Brasileira


O material está reunido no portal Biblioteca Digital Luso-Brasileira, disponível a partir de hoje (10), com mais de 2 milhões de documentos, sob domínio público, de várias épocas e gêneros. Entre eles, a primeira edição de Os Lusíadas, de Luís de Camões, de 1572, e a Carta de Abertura dos Portos, de 1808, assinada pelo príncipe regente, Dom João de Bragança, quatro dias após a chegada da família real à Salvador.

“É a primeira iniciativa a reunir coleções de língua portuguesa, preservando o material – porque, no momento que você digitaliza, você evita o manuseio do original – e o mais importante, democratizando o acesso”, disse a coordenadora da biblioteca, Angela Bettencourt.

O acervo da Biblioteca Luso-Brasileira conta também com obras de 30 instituições de Portugal e mais 20 do Brasil, incluindo o Real Gabinete de Leitura, fundado por imigrantes portugueses no Rio, em 1837. O prédio é tombado pelo Instituto do Patrimônio Estadual.

Esta é a primeira vez que bibliotecas de países de língua portuguesa se juntam para disponibilizar seus acervos conjuntamente e buscam se igualar a outras iniciativas mundiais. Na Europa, a Biblioteca Digital Europeia – Europeana, tem o maior acervo digital do mundo, com mais de 53 milhões de títulos entre livros, desenhos, pinturas, mapas, vídeos e fotos.

De acordo com a coordenadora, o próximo passo é integrar acervos de países de língua portuguesa de outros países e o primeiro deve ser Moçambique. “Eles já vieram aqui fazer um estágio e, provavelmente, serão os primeiros a se juntar nesta iniciativa”. A Biblioteca Digital Luso-Brasileira foi concebida em software livre.


Estudo: 4,5% das escolas públicas brasileiras têm infraestrutura completa prevista em lei

Mariana Tokarnia
Da Agência Brasil

Apenas 4,5% das escolas públicas do país têm todos os itens de infraestrutura previstos em lei, no PNE (Plano Nacional de Educação), de acordo com levantamento feito pelo movimento Todos pela Educação. As condições de infraestrutura são mais críticas no ensino fundamental, etapa que vai do 1º ao 9º ano: 4,8% das escolas possuem todos os itens. No ensino médio, a porcentagem sobe para 22,6%.

O levantamento foi feito com base no Censo Escolar de 2015 e levou em consideração o acesso a energia elétrica; abastecimento de água tratada; esgotamento sanitário e manejo dos resíduos sólidos; espaços para a prática esportiva e para acesso a bens culturais e artísticos; e, equipamentos e laboratórios de ciências. Foi considerada ainda a acessibilidade às pessoas com deficiência.

Entre os itens mais críticos estão o laboratório de ciências --presente em apenas 8,6% das escolas públicas de ensino fundamental e 43,9% de ensino médio-- e a quadra esportiva --presente em apenas 31% de todas as escolas públicas. Fatores básicos, como acesso à água tratada e esgoto sanitário, ainda não são universais, sendo verificados, respectivamente, em 91,5% e 37,9% das escolas públicas.

"O percentual de escolas bem equipadas é super baixo. Em muitos casos estão questões básicas como água potável e esgotamento. Esse percentual não melhora notavelmente. O investimento nas escolas sem dúvida vai estar prejudicado com crise econômica", diz a superintendente do Todos Pela Educação, Alejandra Meraz Velasco.

Os itens são determinados no PNE, Lei 13005/2014, que estabelece metas e estratégias a serem cumpridas pelo país da educação infantil a pós-graduação, até 2024. O PNE estabelece também uma estratégia intermediária, de dois anos de vigência (prazo que terminou na última sexta-feira), quando o país deveria ter definido parâmetros mínimos de qualidade dos serviços da educação básica. Esses parâmetros seriam utilizados como referência para infraestrutura das escolas, recursos pedagógicos, entre outros insumos relevantes, bem como instrumento para adoção de medidas para a melhoria da qualidade do ensino. No entanto, isso não foi feito.

"Esses parâmetros servirão de referência para a infraestrutura e demais insumos. A partir deles, poderíamos definir outra questão do plano, que é o financiamento com o CAQi [Custo Aluno-Qualidade inicial]", diz Alejandra. Os itens já expressos na lei deverão estar presentes nas escolas até 2024. A definição clara de parâmetros de qualidade, no entando, poderá orientar melhor a infraestrutura e os gastos com educação.

Segundo Alejandra, enquanto alguns aspectos do PNE - como o financiamento e a Base Nacional Comum Curricular - têm mais destaque, o básico, que é definir uma cesta de insumos necessários, não tem sido discutido. Na opinião dela, trata-se de um assunto complexo e que varia conforme cada localidade do país. "Vai depender de itens que são necessários em diferentes lugares, de condições climáticas distintas. Isso que não vem sendo discutido, como lidar com a desigualdade no pais. Têm redes mais estruturadas, têm outras que precisam começar do zero, mesmo dentro das grandes metrópoles".

Estrutura x Qualidade

Não há uma comprovação unânime entre os estudiosos de que melhor infraestrutura significa necessariamente maior qualidade da educação. Para o professor da Universidade de Brasília Joaquim Soares Neto, no entanto, esse fator faz diferença no contexto brasileiro.

"Na realidade brasileira, infraestrutura está sim relacionada com qualidade de ensino. Temos uma grande desigualdade de infraestrutura e infelizmente as escolas menos equipadas atendem os alunos mais carentes. Os alunos vêm com uma dificuldade devido a diversos fatores e ainda chegam em escolas menos preparadas", diz. Soares, que é membro do Conselho Nacional de Educação (CNE) e já foi presidente do Instituto Nacional de Estudos e Pesquisas Educacionais Anísio Teixeira (Inep). 

Em 2013, Soares divulgou um estudo no qual cria uma escala para os itens de infraestrutura presentes na escola. Segundo o levatamento, a maior parte das escolas brasileiras (84,5%) apresenta uma estrutura elementar ou básica. Isso significa que tem apenas itens como água, banheiro, energia, esgoto e cozinha.

Na outra ponta, 0,6% das escolas apresenta uma infraestrutura considerada avançada, com sala de professores, biblioteca, laboratório de informática, quadra esportiva, parque infantil, além de laboratório de ciências e dependências adequadas para atender a estudantes com necessidades especiais.


O lápis e o teclado

Por Marcelo Leite

Deveria pensar duas vezes quem estiver convencido de que a escrita à mão caminha para se tornar obsoleta –em particular se tiver filhos pequenos. Tudo indica que essa habilidade é crucial para aprender a ler e a pensar.

Repare na moça ou moço bonito a seu lado no metrô. Enquanto seus polegares deslizam fluidos pela telinha do celular, escrevendo mensagens, parece impossível reter a crença de que caligrafia ainda sirva para alguma coisa.

Quem se importa? Lápis e papel são coisas do passado, não contribuem para se conectar a nada no mundo digital, tornando-se assim inúteis.

Com os smartphones, até mesmo laptops já viram peça de museu. Se antes ensinar a escrever à mão ia perdendo prioridade nos sistemas educacionais, não tardará o momento em que alguém vai defender alfabetizar a criançada direto com letras numa tela.

Será um erro crasso.

Há pencas de estudos mostrando que escrever à mão de maneira legível e rápida tem correlação estreita com desempenho escolar. Vai bem na escola quem escreve direito (médicos sendo a exceção que confirma a regra).

Os gaiatos dirão que professores preferem os alunos com letra bonita e os premiam com notas melhores. Pode ser. Mas há algo mais em jogo a sugerir que vale a pena dedicar-se a fazer meninas e meninos trabalharem mais com lápis e papel.

E quanto mais cedo melhor. Crianças de dois e três anos já estão aptas a experimentar com riscos que as prepararão aos quatro ou cinco para produzir formas geométricas e, depois, letras de fôrma completas.

A partir daí entra em cena, ou deveria, a escrita cursiva. Teclados e telas, só mais para o fim do ensino fundamental 1.

Desenhar os caracteres de maneira contínua, conectando-os uns aos outros, prepara o cérebro para ler. Facilita fixar a correspondência entre grupos de signos e a unidade de sílabas, ou palavras inteiras.

Nossos cérebros precisam ser empurrados na direção certa. Eles não foram feitos para ler e escrever. Essa atividade só se tornou possível porque cooptou para a tarefa uma área conhecida como giro fusiforme, envolvida também no reconhecimento de rostos.

Como tudo em educação, o sucesso desse recrutamento depende de exercício. Se não fosse o receio de soar antiquado demais, diria até ser o caso de considerar seriamente a ressurreição dos cadernos de caligrafia.
Ainda me lembro de ficar com o giro fusiforme em brasa (metaforicamente falando), os dedos suados e o médio da mão direita vermelho na primeira falange, ainda desprovida de calo, diante daquelas três raias em que precisava fazer correr o grafite errático -sem calcar demais.

Maiúsculas e minúsculas como "t" tinham de tocar o limite superior; vogais minúsculas ficavam espremidas na linha do meio; a perna do "p" se esticava toda para baixo. E repetições, muitas: "A casa do João é bonita".

Hoje me espanto, nas raras ocasiões em que a pessoa à minha frente precisa escrever algo à mão, ao ver que ela não tem calo no dedo médio. A maioria nem o emprega para segurar a caneta Bic, apoia direto no anular, ou a segura com quem pega uma pitada de farinha.

Até hoje tomo notas à mão e gravo melhor os argumentos quando posso sublinhá-los no papel. Gesto e memória caminham juntos –e juntos chegam mais longe.


sábado, 25 de junho de 2016

Para download: "Diccionario Paulo Freire"

LINK PARA DOWNLOAD: 

Diccionario. Paulo Freire/. Streck, Danilo R.; Rendín, Euclides; Zitkoski, Jaime José. (Orgs.).- 2da edición en portugués, revisada y ampliada. Auténtica Editora, Belo Horizonte, 2008.
Edición traducida al castellano. Lima, 2015. CEAAL. 526 pp

Este Diccionario Paulo Freire que contiene una compilación de artículos en torno a un conjunto de categorías freirianas, es producto de muchos diálogos. Para el Consejo de Educación Popular de América Latina y el Caribe, CEAAL, el editarlo en castellano tiene por objetivo continuar proyectando ese quehacer dialógico, crítico y creativo que sea coherente con aquel desafío que Paulo lanzó cuando, al crearse el Instituto Paulo Freire en São Paulo, señaló: “No quiero que me repitan, quiero que me reinventen”. Por eso, cada uno de los términos o conceptos comentados por distintas personas en esta obra, se convierte en una palabra generadora de nuevas reflexiones creativas, que nos permiten abrir nuevos espacios de diálogo, de debate, de confrontación con nuestras propias realidades y pensamientos de hoy. Cada aproximación a una de esas palabras generadoras es, en realidad, una oportunidad para aproximarnos al pensamiento de Freire, pero también para que el pensamiento freiriano penetre en nosotros y nos inspire hacia la construcción de un movimiento de educación popular en nuestra región; es, sin duda, una oportunidad para dialogar con Paulo Freire desde todos los rincones de Nuestra América Latina y el Caribe.

Para download: "A Casa da Vovó"

Uma biografia do DOI-Codi (1969-1991), o centro de sequestro, tortura e morte da ditadura militar

No link abaixo, você acha este livro em 3 tipos de arquivo: pdf, epub e mobi - é só dar clique e o arquivo baixa.


Descrição do livro

Este é um trabalho único, daqueles livros obrigatórios que de tempos em tempos ajudam a entender melhor as agruras do país em que vivemos. O jornalista Marcelo Godoy, que construiu nos últimos 25 anos uma respeitadíssima reputação nas redações de grandes publicações, dedicou-se por uma década à mais ingrata das tarefas da profissão: fazer falar quem passou a vida se escondendo.Godoy ouviu alguns dos mais ativos agentes da repressão da ditadura militar para contar a história do DOI-Codi (Destacamento de Operações de Informações – Centro de Operações de Defesa Interna) de São Paulo. Criado a partir de uma operação semiclandestina instituída pelo governo, a Oban (Operação Bandeirantes), o DOI-Codi se transformou rapidamente, no início dos anos 1970, no instrumento do regime de exceção para combater as organizações de esquerda.

Inicialmente, o alvo foi os grupos que optaram pela luta armada. A doutrina do combate à guerra revolucionária mobilizava os militares no Ocidente do pós-guerra, somada a elementos apreendidos da experiência francesa na Argélia, inspirou a criação do órgão que juntou policiais civis ligados ao Esquadrão da Morte com militares que viam, como primeiro objetivo, eliminar os inimigos.

Essa lógica de investigação policial aliada a práticas e hierarquias militares resultou numa máquina de tortura e morte que ultrapassou qualquer limite de humanidade.
Além de mais de duas dezenas de entrevistas com homens – e mulheres – que defendiam o regime, Godoy também realizou uma dedicada leitura dos principais livros e teses acadêmicas sobre a repressão, o que lhe permitiu compreender, como nunca havia sido feito, documentos inéditos que mostram as engrenagens do DOI-Codi paulista e sua articulação com o sistema de informação e repressão da ditadura.

O aniquilamento de grupos guerrilheiros como Molipo e ALN encontra, neste livro, sua mais completa e detalhada descrição. Alguns dos crimes mais violentos da repressão também são elucidados.
Ou seja, este livro é imprescindível para que o país se reencontre com sua história e memória.

sexta-feira, 24 de junho de 2016

Entrevista de Anita Prestes à Revista Continente (edição Junho 2016)

Filha de Carlos Prestes e Olga Benário fala sobre a biografia do pai, feita durante 30 anos

LEIA TAMBÉM: Notas de leitura de Milton Pinheiro, resenha de "Luiz Carlos Prestes: um comunista brasileiro" na revista Margem Esquerda n. 26 (2016)

"É um trabalho de mais de 30 anos"

Por Roberto Arrais

Anita Leocádia Prestes nasceu em 27 de novembro de 1936, na prisão de mulheres de Barnimstrasse, em Berlim, na Alemanha nazista, filha dos revolucionários comunistas Luiz Carlos Prestes, brasileiro, e Olga Benário Prestes, alemã. Anita é graduada em Química Industrial pela UFRJ, doutora em Economia e Filosofia na URSS. Com doutorado também em História pela UFF, ela é professora do Programa de Pós-Graduação em História Comparada da instituição. Presidente do Instituto Luiz Carlos Prestes, ela passou mais de 30 anos pesquisando, entrevistando e escrevendo sobre a vida do líder comunista. No final do ano passado, o resultado desse empenho foi apresentado aos leitores, a biografia Luiz Carlos Prestes - Um comunista brasileiro (editora Boitempo). Nesta entrevista à Continente, ela destacou o cuidado com os fatos e suas referências, falou com admiração sobre o pai, que foi uma das mais destacadas figuras do mundo político brasileiro no século XX.

CONTINENTE: Como a senhora construiu este livro e como isso ocorreu?

ANITA PRESTES: Este livro é uma biografia política de Luiz Carlos Prestes, que visa exatamente retratar os fatos da forma mais comprometida possível com com a verdade, seguindo a orientação do grande historiador marxista inglês Eric Hobsbawm, que dizia que o historiador tem compromisso com a evidência; então, pontuei-me muito por essa visão.

É um trabalho que levou mais de 30 anos para ser realizado. Comecei a trabalhar na temática da participação política de Luiz Carlos Prestes na história do século XX, lá no início dos anos 1980, quando meu pai estava ainda presente, vivo. A vida dele foi muito longa, 92 anos, dos quais 70 de intensidade política no Brasil e no exterior. Então, como num trabalho de historiador era impossível abordar estes 70 anos de uma vez, fui por partes. No início, não tinha nem clareza, certeza de que seria possível elaborar uma biografia, porque realmente era uma tarefa de longo prazo, não sabia o tempo que ia levar, se eu teria vida que me permitisse chegar lá. Comecei pela Coluna Prestes, até porque meu pai tinha uma memória privilegiada, principalmente sobre os acontecimentos da Coluna. Gravamos depoimentos com ele, pesquisei vários anos em diversos arquivos no Brasil, nos depoimentos dele e dos participantes da Coluna, que ainda havia nos anos 1980.

Anos atrás, fui a Moscou para pesquisar nos arquivos da Internacional Comunista, reuni todo este material, refazendo muita coisa, fazendo a pesquisa. Pesquisei períodos em que havia lacunas e cheguei, afinal, a conseguir escrever e publicar esta biografia, para a qual a editora Boitempo fez uma revisão muito cuidadosa. Trabalhamos vários meses com revisores para chegar à publicação deste livro, enriquecido com uma grande quantidade de fotos, mais de 100, com reprodução de documentos inéditos, fotos inéditas, enfim, foi um trabalho cuidadoso, feito pela Ivana Jinkings, a presidente desta editora, e de toda equipe que trabalhou no projeto. Realmente, ficou uma edição primorosa, que todas as pessoas estão achando bonita, bem-feita. A minha preocupação foi deixar uma obra comprometida com a evidência, com a verdade sobre o que foi a vida de Luiz Carlos Prestes para as gerações atuais e futuras.


CONTINENTE: A Coluna Prestes termina sua trajetória invicta, não foi derrotada. Mas, depois desse período, Prestes foi chamado pelos defensores da Revolução de 30, inclusive por Getúlio Vargas, para aderir a esse movimento armado. Como se deu o posicionamento dele diante da solicitação desse apoio à adesão ao movimento de 30?

ANITA PRESTES: O ano de 1930 foi muito importante na vida de Prestes e na história do Brasil. Porque, depois da Coluna, que foi encerrada em 1927, como você disse, invicta - quer dizer, embora tenha enfrentado 53 combates com as forças governistas, nunca foi derrotada. E derrotou 18 generais do exército brasileiro, percorreu 25 mil quilômetros pelo Brasil, 13 estados; foi uma epopeia. Ele compreendeu que não havia forças sociais e políticas, que o Partido Comunista era clandestino, pequeno, sem condições de influir nos acontecimentos políticos. Se ele aceitasse ir para o poder, como os camaradas tenentes queriam, ele viraria uma marionete nas mãos daquelas oligarquias agrárias que fizeram o movimento de 30. Então, ele recusa. Este é um momento importante na vida dele e na história do Brasil, porque pela primeira vez uma liderança, a maior liderança política do Brasil na época, rompe com as classes dominantes, se recusa a ser uma liderança a serviço daquelas oligarquias agrárias que fizeram o movimento de 30, e passa por cima da trincheira da luta de classes e vai se colocar ao lado dos trabalhadores, dos explorados, dos oprimidos e vai sempre, a partir daí, de 1930 até morrer, em 1990. Ou seja, 70 anos lutando contra a burguesia, contra as classes dominantes, solidário e participando da luta dos trabalhadores, dos revolucionários brasileiros.

(Leia a matéria na íntegra na edição 186 da Revista Continente)



quarta-feira, 22 de junho de 2016

Por uma “economia moral dos trabalhadores”

Por Fernando Pureza


Em abril de 2016, o pré-candidato do Partido Democrata, Bernie Sanders, foi convidado pelo Vaticano para fazer uma fala sobre a “urgência de uma economia moral”. Sanders declarou-se, ao longo de sua campanha, como um “socialista”, ainda que o termo seja polissêmico – e, é claro, tenha suas particularidades num contexto americano. Mas sua noção de “economia moral” não carregava em si as particularidades de uma concepção socialista. De fato, o que pautava o discurso de Sanders era justamente a ideia de uma economia baseada “no bem comum”, um discurso bastante afinado com as críticas ao capitalismo feitas pelo Papa Francisco[1]. Não há nada no discurso que fale sobre o controle da economia feito pelos trabalhadores. A economia torna-se assunto no qual as autoridades “morais” emitem os juízos sobre como devem ser as relações de trabalho, a distribuição de riqueza e até mesmo o papel das classes sociais.

O termo “economia moral” ficou, durante muitos anos, longe dos holofotes e sem dúvida há um anglicismo de origem. Em 1837, o cartista Bronterre O’Brien teria usado o termo pela primeira vez, opondo a “economia moral” aos “economistas políticos” que “arruinaram os afetos em troca de produção e acumulação incessantes”.[2] Em outras palavras, no século XIX se afirmava que a economia de mercado, tal como defendida pelos smithianos, colocava os rendimentos do capital acima dos afetos e das noções de reciprocidade conhecidas anteriormente. Essa contestação reverberou ao longo do tempo e chegou até mesmo em Marx, que nos seus Manuscritos Econômico Filosóficos, afirmou que a alienação do trabalho fazia com que o trabalhador só se sentisse livremente ativo em suas funções animais, ou seja, desprovido dos afetos e de reciprocidades. Porém, não se pode negar que a “economia política” triunfou ao longo do tempo sobre a “economia moral”.

Contudo, um observador do século XXI pode se perguntar: será que essa vitória da “economia política” no centro do capitalismo foi absoluta e atemporal? Será que sua universalidade é incontestável? Ao que tudo indica, Sanders e o Papa parecem discordar desse triunfo e levantaram vozes que, reivindicando a “economia moral”, passam a questionar alguns dos pressupostos do capitalismo contemporâneo. Mas será que a “economia moral” pode ser, de fato, uma arma das lutas sociais contemporâneas? Ou ela se resume a um recurso retórico pouco substancializado ainda nos discursos políticos?

A economia moral thompsoniana

Foi o historiador britânico E.P. Thompson que trouxe à tona a possibilidade de investigar a “economia moral” como uma “ideologia” que atribui “papeis econômicos” e que endossa “práticas costumeiras, num equilíbrio particular de forças sociais ou de classes”.[3] É possível afirmar que a forma pela qual Thompson concebeu seu argumento, ele procurou demonstrar que quando os motins da fome se desencadearam na Inglaterra do século XVIII, eles seguiram um roteiro de ação pré-definido. A multidão, como afirmava Thompson, não buscava o controle da terra ou dos alimentos, mas sim reestabelecer um equilíbrio firmado a partir dos costumes paternalistas e das antigas obrigações feudais dos magistrados sobre o “bem viver”. Aqueles que dependiam do trigo vendido nos mercados, que tinham direito ao “justo preço”, viram a economia de mercado moderna se organizar e foram os primeiros a sentir seus efeitos. Os cereais passaram a ser escondidos das feiras, os moleiros aumentaram seus preços e a lei da oferta e da procura passou a reger os mercados ingleses com punho de ferro.

Retomar a análise histórica de Thompson nos ajuda a pensar justamente na ruptura do equilíbrio, um sentido muito semelhante ao que Bernie Sanders e o Vaticano parecem compartilhar sobre a “economia moral”. Todavia, o desequilíbrio que o historiador britânico observa é aquele que decorre da reformulação da estratégia de dominação política da gentry inglesa. Se, durante o revolucionário século XVII inglês, essa nobreza latifundiária reforçou seu paternalismo como forma de se defender da ofensiva dos camponeses radicais “niveladores” e “cavadores” (levelles e diggers), no século XVIII, após a restauração Stuart e a ascensão dos Hannover, a Inglaterra viu nascer alianças cada vez mais explícitas entre mercadores e banqueiros com a gentry, o que incentivou a formação de uma classe proprietária de terras cada vez mais focada na rentabilidade da propriedade e menos desejosa de reforçar os laços patriarcais de reciprocidade. Logo, a multidão que se amotinava cobrava dos “patrícios” que coibissem a ganância dos comerciantes que, nos novos tempos da economia de mercado, estavam se aproveitando dos pobres.

Cabe ressaltar que, no século XVIII, as referências da multidão para coibir as gananciosas práticas de açambarcadores e atravessadores eram bastante plurais. Além das demandas acerca do paternalismo e dos costumes tradicionais que recaíam sobre magistrados e latifundiários, havia referências sobre a sacralidade da família (não obstante, muitas mulheres emergiram como lideranças nos motins) e uma série de elementos retirados da tradição radical puritana que fizeram parte da vida religiosa inglesa no século XVII. Mas nenhuma referência era mais poderosa do que o uso da violência, muitas vezes esteticamente trabalhada a partir das canções demeritórias, efígies queimando, castração e morte de animais, fogo em celeiros, entre outras práticas que criavam um repertório de ações que transformavam uma “moralidade” em algo muito maior do que uma estrutura mental. A “economia moral” era a cobrança sobre noções de justiça que eram compartilhadas, mas conforme as classes dirigentes passaram a aceitar os pressupostos da “economia política” como verdades incontestáveis, as noções de justiça de uma época tornaram-se rapidamente “subversão da ordem” em outra.

Com o que foi colocado até agora, é possível conceber um paradoxo sobre a “economia moral” segundo E.P. Thompson. Em parte, ela seria um elemento reacionário, pois conceberia uma possibilidade de retomar uma situação pré-capitalista. Por outro, seu radicalismo pressupunha que poderia se usar da violência para coibir as classes dirigentes a não romperem o frágil equilíbrio pelo qual as relações de reciprocidade econômica estavam ancoradas. Esse paradoxo foi equacionado por Peter Rogers de outra forma, pensando não em termos de um binarismo entre “radicalidade” e “reacionarismo”, mas sim a partir de uma compreensão da cultura camponesa como algo fragmentado e diversificado, que incluiria tanto elementos conservadores como inovadores e que estariam constante tensão. A “economia moral”, portanto, agravaria essa tensão, pois colocaria elementos conservadores e inovadores sob tensão, operando mutuamente. Em última instância, da mesma forma que a “economia moral” poderia contemplar o passado, ela também poderia vislumbrar um futuro alternativo.[4]

Talvez seja possível afirmar, todavia, que essa conexão entre “passado” e “futuro” seja algo específico da cultura camponesa europeia – algo que preocupou tanto Thompson quanto Gramsci em suas análises sobre a hegemonia. No caso do historiador britânico, vale ressaltar que ele procurou destacar a historicidade do conceito de “economia moral. Porém, Thompson também afirmava que a “economia moral” poderia ser utilizada para outros contextos, destacando que ele poderia ser conciliado à terminologia de classe social. Assim, ao fazer essa ligação seria possível perceber sua articulação com a noção de hegemonia, entendida aqui como um processo “articulado nas relações diárias de uma comunidade, sendo mantido apenas por concessão e proteção (nos bons tempos) e, pelo menos, por gestos de amparo nos tempos difíceis”[5]. Quando os compromissos materiais e simbólicos firmados no passado não são mais cumpridos, a estabilidade de uma hegemonia passa a entrar em xeque. Portanto, a “economia moral” não é somente uma referência isolada no século XVIII inglês, mas também um elemento específico da formação da ordem capitalista, pois ela é uma equação constante que tensiona as obrigações das relações de dominação a partir do olhar dos de baixo.

Apontamentos para uma economia moral dos trabalhadores

Uma leitura possível sobre o fato de Sanders e o Papa retomarem uma noção de “economia moral” em pleno século XXI, é de que haveria aqui uma preocupação sobre a ineficácia de uma hegemonia, ou seja, pela possibilidade dos de baixo questionarem o frágil equilíbrio pelo que se encontram as relações de dominação. Todavia, também é possível perceber que há uma falta de substancialidade sobre o que seria a “economia moral” e isso abre margem para certas dúvidas. Tanto no discurso de Sanders quanto no de Francisco, existe uma diretriz anti-capitalista? Ou será que ambos estão operando com a ideia de um capitalismo na sua forma hegemônica do passado, ou seja, enraizado nas comunidades a partir de um Welfare State tipicamente americano? Muitas das discussões sobre a tributação de grandes fortunas trazem em seu seio essa convicção, ou seja, de que é possível uma distribuição mais equânime da riqueza tal como ocorria na Era de Ouro do capitalismo ocidental. Até mesmo o milionário Donald Trump, candidato à presidência nos Estados Unidos pelo Partido Republicano chegou a levantar a necessidade de ajustes tributários capital para as classes dominantes em detrimento do amparo estatal sobre os trabalhadores.[6] Mas certamente entre Trump, Sanders e o Papa Francisco I não há um acordo claro sobre distribuição de renda – e certamente o milionário americano não parece ser um grande adepto da “economia moral”.

Contudo, há um interessante ponto em que todos eles se encontram: em nenhum deles há no horizonte a ideia de que os trabalhadores e trabalhadoras deveriam controlar a economia. Sanders talvez seja o que mais se aproxime dessa perspectiva, mas seu discurso pressupõe uma distribuição igualitária da riqueza – e não a coletivização dos meios de produção, por exemplo. Há uma preocupação, nesses termos, de que possa existir um “preço justo”, um “bem-estar”, um “bem comum”… mas nada mais do que isso. Há, em última instância, uma profunda crítica que aponta para aquilo que Karl Polanyi chamou de “desenraizamento da economia”, ou, em outras palavras, para o fato de que a economia de mercado não serve às pessoas. Sendo assim, uma “economia moral” se colocaria como uma economia “enraizada”, capaz de lidar com o problema do “bem comum”. Mas sobre qual autoridade seria construída essa moralidade para uma nova economia? E, mais ainda, será que essa moralidade seria anticapitalista?

Sobre a questão da autoridade, parece lógico que o Papa Francisco, o líder da Igreja Católica, que queira se colocar como autoridade no tema – apesar do fato de que o Banco do Vaticano segue sendo um dos bancos mais sigilosos do mundo. A novidade talvez seja que Bernie Sanders também se coloque como liderança em favor de uma “economia moral”, tendo em vista que não se esperava que no centro do capitalismo ocidental pudesse surgir uma liderança política capaz de questionar a imoralidade das formas de acumulação de riqueza. Diante da formação do Welfare State americano, é possível conceber que havia algum tipo de construção sobre o “bem comum” existente na sociedade estadunidense, cuja responsabilidade moral parecia recair sobre o Estado – ainda que sua força ideológica talvez tenha sido mais expressiva do que os mecanismos do Estado para garantir o bem-estar dos cidadãos.

Porém, desde os Reaganomics da década de 1980, o neoliberalismo passou a ser a força motriz não só das economias ocidentais, mas também sua forma específica ideológica, impondo limites sobre o que seria razoável dentro da política. A fórmula “There is no alternative” de Thatcher foi combinada com a ideia de que “não havia uma sociedade, mas sim um conjunto de indivíduos”. Ao serem interligadas essas máximas, as noções de “bem-estar” e “bem comum” foram deixadas de lado do debate político no capitalismo e a força da hegemonia neoliberal se consolidou de forma muito semelhante a reclamação dos cartistas do século XIX: os afetos estavam agora arruinados em troca da produção e acumulação incessantes. Nesse contexto, conforme o Estado se ausentara da responsabilidade de definir um “bem comum”, milhões de trabalhadores se viram em situação de precariedade e desemprego, um fenômeno que desde 2008 passou a ganhar uma dimensão global até mesmo no centro do capitalismo.

Porém, a multiplicidade de movimentos que emergiram – e cada vez mais emergem – no cenário pós-2008 indicam, no mínimo, que essa hegemonia que abstrai o “bem comum” de seu horizonte está sendo questionada em suas próprias entranhas. Isso, por si só, ajudaria a explicar a preocupação de Sanders e do Vaticano em conceber uma noção de “economia moral” para o século XXI. Todavia, há um fator ainda não explorado nessa conjuntura histórica que se abre: a dizer, a possibilidade que os trabalhadores e trabalhadoras tornem-se os sujeitos responsáveis por suas próprias noções “morais” sobre a economia, que eles sejam responsáveis pela definição de um “bem comum”. Isso implicaria, por sua vez, reconhecer que as formas pelas quais a economia poderá voltar a se “enraizar” nas comunidades não dependeria necessária ou exclusivamente nem do Estado, nem de um líder político e muito menos de uma religião organizada – o que ajuda a explicar porque essa não é uma preocupação essencial nem para Bernie Sanders e nem para o Papa Francisco.

Para conseguir construir, portanto, uma “economia moral dos trabalhadores” e que seja, em sua essência anticapitalista, cabe as esquerdas tensionarem os pontos que as “autoridades morais” não parecem dispostas a fazê-lo. Em tempos de crise de hegemonia, procurar conceber relações econômicas amparadas na experiência daqueles que lutam e na possibilidade de um sistema de reciprocidade pode ser extremamente revolucionário. Até porque, o “bem comum” concebido pelos próprios trabalhadores pode não ser o mesmo que o Estado e a Igreja defendem. O dever das esquerdas, nesse cenário, é justamente buscar consolidar uma “economia moral” que seja uma arma contra a “produção e acumulação incessantes” e que construa o “bem comum” a partir da vivência das classes subalternas.

Notas
[1] SANDERS, Bernie. The urgency of a Moral Economy: reflections on the 25th Anniversary of Centesimus Annus. 15 de abril de 2016. Ver: https://berniesanders.com/urgency-moral-economy-reflections-anniversary-centesimus-annus/
[2] THOMPSON, E.P. A economia moral revisitada. IN: THOMPSON, E.P. Costumes em comum. São Paulo: Ed. Companhia das Letras, 2005. p. 260.
[3] Idem, p. 258.
[4] ROGERS, Peter. Stirring words, ruling ideas and the price of bread: reflections on a Gramscian-Thompsonian Approach to Cultural History. IN: Past Imperfect. Vol. 10. University of Alberta: 2004. p. 16.
[5] THOMPSON, E.P. A economia moral revisitada. In: THOMPSON, E.P. Costumes… p. 261.
[6] LAWDER, David; DUNSMUIR, Lindsay. Trump changes tune on tax hikes for wealthy Americans. Reuters, 9 May 2016. Disponível em: . http://www.reuters.com/article/us-usa-election-trump-idUSKCN0XZ0I3

FONTE: Blog Junho
 

sábado, 18 de junho de 2016

Ciência & Letra - A Miséria da Historiografia


Ciência & Letra - A Miséria da Historiografia

Ciência & Letra - A Miséria da Historiografia: esta edição do Ciência & Letra fala sobre o livro "A Miséria da Historiografia", que conta a história da sociedade brasileira sob o regime ditatorial pós-1964. A proposta do livro e a abordagem efetivamente adotada pelos autores situam o leitor no plano da História universal.

O apresentador Renato Farias conversa com Demian Bezerro de Melo, organizador do livro e doutor em História pela Universidade Federal Fluminense (UFF); e Romulo Mattos, também doutor em História pela UFF.

Programa exibido em 23 de fevereiro de 2016.

Apresentador: Renato Farias

O Ciência e Letras é um programa criado em uma parceria entre a Editora Fiocruz e o Canal Saúde, destinado a amantes de livros em geral. Ele é o resultado de um encontro entre o que se escreve na academia com temas de outros saberes.


Para download: Filosofía Del Siglo XXI Para Principiantes

LINK PARA DOWNLOAD:
https://drive.google.com/file/d/0By7ehuAaQLwQdEFMYnhyenlwZ2s/view?pref=2&pli=1

¿Qué tienen en común la física cuántica y una historia de amor? ¿Son los animales víctimas de discriminación? ¿Es el conflicto esencial para el consenso? ¿Es la creencia en la verdad una creencia religiosa? ¿Es posible que el mundo esté poblado de zombis? ¿Puede la filosofía del lenguaje resolver los dilemas de la manipulación genética? 

Éstas son algunas de las preguntas con las que los filósofos del siglo actual intentan abrirse camino entre los dilemas que la política, la economía, las ciencias naturales y la propia tradición filosófica le plantean a la humanidad hoy en día: las biotecnologías, los nuevos movimientos sociales, el resurgimiento de la religión, el significado de la Verdad, los derechos de los animales, el funcionamiento de la mente, el futuro de la democracia… Ya sea aportando nuevos conceptos para resolver viejos problemas o recuperando conceptos olvidados para atender a las cuestiones del momento, los filósofos del siglo XXI no le pierden pisada a la novedad. 

Los debates que aquí se exponen se están produciendo mientras el lector lee esta contratapa. Sus protagonistas son los filósofos cuyos nombres se escuchan cada vez más y cuyas ideas se están volviendo parte de nuestro sentido común: Žižek, Badiou, Habermas, Rorty, Vattimo, Butler, Laclau, Negri, Dennett, Singer, Rancière, Appiah, Pogge, Benhabib, etc. Desde el concepto de acontecimiento hasta el nuevo feminismo, desde la teoría de la sociedad hasta las neurociencias, `Filosofía del siglo XXI para principiantes` es un mapa ideal para orientarse en el laberinto de ideas del nuevo milenio. 

Sobre el ilustrador Polaco Scalerandi (Buenos Aires, 1977) podemos decir que es un dibujante que estudió en la Escuela Prilidiano Pueyrredon, en el I.U.N.A y en la Carcova, y que publica sus trabajos en medios gráficos de Argentina, España, Chile, México y Francia entre otros. Trabajó para productoras gráficas y expuso su obra en galerías y centros culturales de Argentina, Puerto Rico, Francia y Rusia. Coedita la revista `Lule le lele` desde 2001 (15 números y un libro), y también da clases con Gastón Souto en la Escuela Argentina de Historieta (EAH).

quarta-feira, 15 de junho de 2016

A estratégia dos EUA

por Jorge Beinstein [*] 
entrevistado por Hemisfério Izquierdo

 
"Tanto Clinton como Trump oscilarão entre o belicismo, cada vez mais enlouquecido, e a procura de acordos provisórios com seus rivais". Jorge Beinstein.

HI: Quando Obama ganhou em 2008 construiu-se uma narrativa que quase assinalava o fim das pretensões hegemónicas e belicistas dos Estados Unidos, a ponto de que no ano 2009 deram-lhe o Nobel da Paz. Que balanço faria destes oito anos de gestão Obama? Modificaram-se em algo seus objectivos e sua estratégia em relação à gestão Bush? 

JB: Em relação à América Latina, a gestão de Obama começou com o golpe de estado nas Honduras e continuou com uma ofensiva geral tendente à recolonização da região. A seguir aos recuos imperiais, da perda de influência que caracterizou a presidência Bush (recordemos o fracasso do ALCA), a presidência Obama lançou uma vasta operação de conquista que se desdobrou de maneira complexa, flexível mas sistemática. 

A nível global a estratégia belicista de Bush foi enriquecida com um vasto leque de intervenções imperialistas como o golpe de estado na Ucrânia, a destruição da Líbia e a guerra contra a Síria, incluída a criação e colocação em andamento do chamado "Estado Islâmico". Tudo isso num contexto de decadência económica, social e institucional dos Estados Unidos que se havia iniciado muito antes mas que se foi agravando durante a era Obama. 

HI: Tudo indica que os EUA rumam para uma escolha entre Trump e Clinton. Para além da pirotecnia e das declarações altissonantes será de esperar alguma diferença entre ambos os candidatos em relação à estratégia dos Estados Unidos para com o mundo? 

A LUMPEN-BURGUESIA 

JB: Em primeiro lugar considero que acima dos candidatos existe o que se costuma chamar "política de Estado", ou seja, as estratégia e decisões do poder real que no caso dos Estados Unidos é constituído por uma cúpula reduzida que articula, ou tentar articular, uma rede parasitária de interesses financeiros e militares que operam como uma massa instável de camarilhas mafiosas. É o que defino como lumpen-burguesia [1] imperial ou, conforme definiu Isa Conde: lumpen-imperialismo. 

Em segundo lugar é necessário ter em conta que actualmente os Estados Unidos atravessam uma forte crise de representatividade da sua estrutura política que coincide com a degradação geral do sistema social. A vitória de Trump é a expressão do declínio do Partido Republicano, um energúmeno completamente inescrupuloso conseguiu deslocar os quadros tradicionais desse partido. A candidatura de Clinton, ao contrário do caso republicano, mostra os partidos políticos tradicionais a bloquearem toda possibilidade de renovação, como aconteceu no momento da candidatura de Obama que permitiu rejuvenescer o rosto do Partido Democrata. 

Em terceiro lugar há que prestar atenção ao facto de que a economia norte-americana se encontra à beira da recessão após vários anos de crescimento anémico. Se a recessão chegar durante a presidência Trump ou Clinton agravar-se-ão as tendências entrópicas, o descontentamento social, a perda de legitimidade das instituições, etc. A referida recessão, altamente possível, faz parte de um processo recessivo global que actualmente abrange a Europa, Japão e boa parte da América Latina, a começar pelo Brasil e seguindo-se a Argentina. 

Nos últimos anos os EUA acentuaram o seu perfil militarista, empurrando a NATO contra a Rússia, tentando criar um cerco agressivo contra a China, multiplicando suas intervenções directas e indirectas em numerosos países. Isso não lhe serviu para resolver a sua crise e sim, ao contrário, agravou-a. Se continuar a avançar pelo caminho belicista traçado por Bill Clinton, Bush (filho) e Obama cedo ou tarde chegará a um ponto de inflexão extremamente grave. Isso não exclui o facto de que a elite dominante norte-americana em certo momento poderia tentar chegar a algum tipo de acordo de coexistência com a Rússia e a China, ainda que pareça difícil que o tente (mas não impossível). Além disso não é fácil prever quanto tempo poderia durar esse apaziguamento. O problema central é que a sobrevivência da casta parasitária estado-unidense é impossível sem a extensão do saqueio imperialista sobre o resto do mundo e que ao mesmo tempo esse esforço saqueador, político-militar-financeiro, agrava a sua desordem interna. 

Considero que tanto Clinton como Trump oscilarão entre o belicismo, cada vez mais ensandecido, e a busca de acordo provisórios com seus rivais. Cada um deles o fará de acordo com o seu estilo. Trump aos gritos e Clinton com bons modos. 

HI: Depois da chamada "primavera árabe" [2] iniciou-se uma espécie de guerra permanente no Médio Oriente com foco na Síria mas que afecta toda a região. Quais são as chaves para entender esta guerra? Que interesses perseguem os EUA neste conflito e como podermos interpretar a reaparição da Rússia como "global player" neste contexto? 

OS AUTO-ATENTADOS DO 11/SET 

JB: A guerra contra a Síria é a continuidade da ofensiva militar estado-unidense no Médio Oriente e na Ásia Central que começou com os auto-atentados do 11 de Setembro de 2001 [3] e as invasões do Afeganistão e Iraque e da tentativa fracassada de liquidar o Irão. 

Fracassou a estratégia norte-americana para apoderar-se dessa vasta região e assim tomar o controle de 70% dos recursos petrolíferos do planeta e a seguir estrangular a Rússia e a China. Nesse sentido a tentativa de liquidar a Síria, transformá-la numa não-sociedade (como fizeram com a Líbia), num "vespeiro" desestabilizador (como a chamaram seus estrategas) pode ser entendida como uma tentativa desesperada, altamente irracional, para se contrapor à sucessão de fracassos que vão desde a interminável guerra no Afeganistão (eles acreditavam que ia ser fácil uma "limpeza" desse território) até a sua incapacidade para destruir um Irão que ampliou sua influência na zona. Os estrategas do Império estavam certamente convencidos de que a caotização da Síria, somada à conquista com êxito da Ucrânia, agravaria o cerco em torno da Rússia e Irão o que lhe teria permitido desenvolver uma ofensiva esmagadora nessa zona. Mas depararam-se com um exército sírio com um grande potencial de combate e forte apoio popular, com a intervenção russa e a do Irão. Sobretudo a intervenção da Rússia com uma capacidade militar e uma audácia política inesperadas. 

Esse foi o enésimo erro, a enésima subestimação da Rússia por parte dos Estados Unidos, demonstração da decadência intelectual dos seus dirigentes. Eles acreditavam que, a partir de Yeltsin, a Rússia sofreria uma deslocação irreversível, prolongamento da derrocada soviética. Pelo contrário, verificou-se uma reacção da identidade russa recompondo seu Estado, o centro histórico da referida identidade apoiado em raízes culturais muito profundas, na sua economia e naturalmente do seu complexo industrial-científico-militar. Isso favorecido pelo aumento do preço do petróleo e do gás (baluarte do comércio externo russo), pela aliança estratégica com a China e pelo atolamento estado-unidense na Ásia Central. 

UCRÂNIA, O FILHO IDIOTA DOS PADRINHOS OCIDENTAIS 

Os estrategas norte-americanos também se equivocaram ao acreditarem que com o golpe de estado na Ucrânia atrairiam a Rússia para um pântano de guerra prolongada (como havia ocorrido com a URSS no Afeganistão), mas os russos responderam de maneira inteligente esquivando-se à provocação e ajudando a converter a Ucrânia numa espécie de filho idiota dos seus padrinhos ocidentais, submersa numa interminável guerra étnica. 

E tornaram a equivocar-se quando acreditaram que a Síria seria uma espécie de Líbia-bis, que a Rússia não se atreveria a intervir, que os bandos de mercenários "islâmicos" (?) se apossariam completamente desse país. A Rússia interveio e os que não foram capazes de intervir contra a Rússia foram os ocidentais. O que está agora a ocorrer é que a aliança estratégica entre Rússia e China emerge como o maior desafio à supremacia ocidental. 

HI: Passando à América Latina, quais foram os eixos da estratégia dos Estados Unidos para com o nosso continente durante estes mais de 15 anos de progressismo? Estamos perante uma perda de hegemonia ou diante de uma mudança de estratégia? 

GUERRA DE QUARTA GERAÇÃO 

JB: Podemos falar das duas estratégias sucessivas mais recentes. A primeira delas tentou conduzir a região rumo à integração económica e em consequência geopolítica com os Estados Unidos. Foi o prolongamento (finalmente anacrónico) das manobras desenvolvidas a partir do chamado Consenso de Washington. Mas a América Latina havia mudado, caíam os regimes neoliberais e emergiam as experiências progressistas. O fracasso da imposição do ALCA [Acordo de Livre Comércio das Américas] foi um golpe muito duro para a diplomacia imperial. A partir da presidência de Obama os Estados Unidos implementaram uma nova estratégia de reconquista que desenvolveu toda a arte da Guerra de Quarta Geração, desde os golpes suaves com êxito nas Honduras, no Paraguai, na Argentina e no Brasil até o cocktail intervencionista contra a Venezuela e outras operações de controle. Para isso utilizam entre outras coisas as lumpen-burguesias locais e seus prolongamentos sociais internos. 

HI: Considerando três elementos recentes que estão a reconfigurar o cenário – as negociações de paz na Colômbia, o descongelamento das relações Cuba-EUA e a profunda crise que os governos progressistas estão a atravessar – o que podemos esperar das políticas dos Estados Unidos em relação à região? Quais seriam hoje seus principais objectivos? 

JB: Os governos progressistas chegaram ao seu limite histórico. Pretendiam reformar o capitalismo colonial tornando-o produtivo, autónomo e socialmente inclusivo sem liquidar os fundamentos do sistema. Mas esses fundamentos económicos, mediáticos, culturais puderam reproduzir-se para finalmente arremeter e em vários casos derrubar esses governos. Desde já o qualificativo "progressista" é ambíguo e por vezes confuso, abrange desde experiências neoliberais rosadas como a de Bachelet no Chile até outras com pretensões "socialistas" como na Venezuela ou na Bolívia. Os Estados Unidos aproveitaram as debilidades do progressismo agravadas pelo desenvolvimento da crise global para avançar na sua estratégia de reconquista da região. 

Os diálogos de paz na Colômbia fazem parte da estratégia imperial. Não puderam derrotar militarmente a insurgência, tentam então destruí-la mediante um complexo emaranhado que inclui pressões e concessões, agressões descaradas e gestos amistosos, tudo isso destinado a aprisioná-la numa rede gelatinosa que a iria arrastando a um beco sem saída. 

A partir do golpe suave na Argentina os Estados Unidos apontaram a três objectivos prioritários. O primeiro acaba de ser conseguido: a reconquista do Brasil. Nos próximos meses tentarão liquidar os obstáculos venezuelano e colombiano. 

Finalmente, o descongelamento das relações dos Estados Unidos com Cuba procura realizar um grande abraço-de-urso que submerja a ilha numa onda empresarial-mediática destinada a conseguir uma "mudança de regime". Mas esses jogo não é jogado por um só protagonista, o Império, e sim vários, especialmente Cuba que tenta aproveitar o referido degelo para fortalecer a sua economia em plena transição entre modelos e que obviamente tenta preservar sua autonomia. 

ESTADOS MAFIOSOS E SOCIEDADES CAÓTICAS 

O objectivo final da estratégia imperial é converter a região num espaço desarticulado, com estados mafiosos e sociedades caóticas, o que é necessário para a realização de grandes saqueios financeiros e de recursos naturais. 

HI: Aqui no Hemisferio Izquierdo nos propomos a contribuir para o debate sobre as perspectivas estratégicas na América Latina, considerando o cenário que nos colocas. Existe hoje um esboço estratégico claro para orientar a luta? Quais deveriam ser os eixos centrais de uma estratégia socialista hoje? 

JB:  Existem esboços, reflexões, práticas sociais promissoras, resistências de diverso tipo, grandes movimentos populares... Está a terminar a "era progressista" mas a sua substituição reaccionária não abre uma etapa de governabilidade direitista, elitista, e sim um horizonte caótico de saqueios, de regimes instáveis, hiper-corruptos. Que outra coisa podemos esperar dos novos "governos" do Brasil e da Argentina ou do que poderia chegar a ser um regime pós-chavista na Venezuela? De qualquer modo a onda progressista não foi uma experiência inútil, ela irrompeu na base do desgaste e em certos casos do desmoronamento neoliberal mas também graças à impotência popular para converter esses fenómenos em disparadores de revoluções populares que eliminassem pela raiz as estruturas coloniais e seus complementos mediáticos e institucionais. Não se produziram revoluções e sim processos de recomposição com inclusão social ao sistema mais ou menos reformado. Isso naturalmente permitiu a sobrevivência das elites mas também despertou a auto-estima de massas populares submersas. Multiplicaram-se as organizações de base, conquistaram-se direitos, melhorias sociais que os governos direitistas tentam agora ou tentarão eliminar. Sua actuação retrógrada gera, gerará, anticorpos, resistências, militâncias, ou seja, uma contra-cultura dos de baixo que graças ao atordoamento dos de cima tem a possibilidade de converter suas lutas, suas práticas variadas, numa conscientização profunda, na percepção das causas da tragédia. Existe um provérbio na Índia que diz que quanto mais alto subir o macaco mais fácil será ver-lhe o cú. Bem, o revanchismo, as tropelias, os roubos descarados das elites dominantes a dançarem no alto do poder permitem ver a sua verdadeira natureza, seus mecanismos de opressão. Em suma, a estrutura do capitalismo colonial, transnacionalizado, perceber claramente sua decadência, seu corpo repugnante. 

Estas elites não são os motores de reconversões capitalistas e sim a expressão da degradação do sistema global. Isto significa que na América Latina a rebelião contra o sistema está na ordem do dia e que "a estratégia" é a da construção de avalanches populares, de movimentos insurgentes de amplo espectro social, respondendo às culturas específicas de cada povo, a sua identidades, suas memórias, suas potencialidades criativas. Certamente se cruzarão no caminho dirigentes manipuladores de diferentes categorias a tentarem domesticar as massas, a oferecerem alternativas aparentemente "possíveis". Haverá que passar-lhes por cima. O aprofundamento da crise deixará aberta a porta para as revoluções populares. 

08/Junho/2016

[3] Ver o vídeo   11 Septembre, Anatomy of a Great Deception (legendado em francês). 

[*] Doutorado de Estado em Ciências Económicas (Universidade do Franche Comté, Besançon, França), especialista em prognósticos económicos. Foi consultor de organismos internacionais e de governos, dirigiu numerosos programas de investigação e foi titular de cátedras de economia internacional e prospectiva tanto na Europa como na América Latina. É professor titular das cátedras libres "Globalização e Crise" nas Universidades de Buenos Aires e Córdoba (Argentina) e de Havana (Cuba) e director do Centro de Prospectiva y Gestión de Sistemas (Cepros). Sua página web é http://beinstein.lahaine.org/ 

O original encontra-se em www.hemisferioizquierdo.uy/... 


terça-feira, 14 de junho de 2016

Maceo y Che: paradigmas de la historia cubana

Cada 14 de junio se recuerda en Cuba el natalicio de dos héroes, Antonio Maceo Grajales y Ernesto Che Guevara.

Por Osmaira González . - Llega el sexto mes del año y los cubanos pensamos en una fecha significativa: el 14 de junio. Ese día, quiso la historia, hacer coincidir el natalicio de dos grandes hombres. Por su talento y rebeldía Antonio Maceo Grajales y Ernesto Guevara de la Serna se igualan en el tiempo, se unen por su lucha a favor de la independencia del pueblo cubano.

Bravura y entereza los distinguen. Aunque llegaron al mundo en siglos diferentes, la fecha resulta propicia para que cada año la Mayor de las Antillas les rinda merecido tributo a estos dos héroes.

Ochenta y tres años separan sus nacimientos, pero muchos son los puntos en contacto entre estos dos hombres. Maceo, urgido por las circunstancias del exilio, recorre varias naciones de América Latina, mientras que el guerrillero cubano-argentino, llevado por su afán de conocimientos y aventuras, también transita por gran parte de la geografía latinoamericana.

Ambos, en su momento y como parte de las luchas por la independencia de Cuba, protagonizaron la invasión de Oriente a Occidente. El Titán de Bronce, junto al Generalísimo Máximo Gómez, evidenció sus cualidades excepcionales de estratega militar durante la epopeya de 1895, y sus gloriosas heridas en combate fueron sus más preciados trofeos de guerra.

Muchos años después, a finales de 1958, el Che reeditó junto a Camilo Cienfuegos otra invasión de Oriente a Occidente durante la guerra de liberación contra la tiranía de Fulgencio Batista.

Profundo sentido de dignidad y humanismo caracterizó a los dos combatientes, que, como detallan los estudiosos de sus vidas, siempre buscaron conocer las inquietudes y anhelos de los soldados bajo su mando.

Tanto Maceo como el Che se preocuparon por la suerte de otros pueblos del mundo. El protagonista de la Protesta de Baraguá expresó su deseo de combatir también por la libertad de Puerto Rico, mientras que Ernesto Guevara partió hacia otras tierras preocupado por la suerte de los más humildes.

La historia se ha encargado de unir a estos dos valerosos y honestos hombres, que dejaron una profunda huella en la contienda de Cuba, pero también de toda América Latina.

De ellos diría el líder histórico de la Revolución cubana, Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz:

«Maceo era ya un personaje legendario cuando el Che vino al mundo. Si uno afirmó que quien intentara apropiarse de Cuba recogería el polvo de su suelo anegado en sangre si no perecía en la lucha, el otro anegó con su sangre el suelo de Bolivia tratando de impedir que el imperio se apoderara de América. Ambos fueron invasores de Oriente a Occidente; ambos murieron en combate; ambos son hoy símbolos insuperables de valor e intransigencia revolucionaria».

Tomado de Vanguardia


Não houve primaveras nem foram árabes

Entrevista com Ahmed Bensaada
Por Nordine Azzouz*

Esta importante entrevista com Ahmed Bensaada, académico argelino radicado no Canadá, conhecedor profundo da realidade, desmascara o caráter democrático das chamadas «Primaveras Árabes», a sua origem e verdadeiros objetivos. E pergunta: por que razão as chamadas Primaveras árabes deixaram intocadas as antidemocráticas monarquias árabes?
Autor de dois livros sobre este tema, «Arabesco americano», em 2011, e Arabesco$, em 2015, Ahmed Bensaada defende e prova que as chamadas «Primaveras árabes», nada tiveram de primaveril e muito menos de árabe…

Ahmed Bensaada**, universitário argelino vivendo no Canadá há vários anos, segue atentamente as mudanças e perturbações no Magrebe e no Médio Oriente, às quais consagrou vários artigos, colóquios e conferências. Sobre as “primaveras” árabes assumiu desde o início um olhar muito crítico, tendo mesmo escrito um livro, Arabesco americano, a que se seguiu há pouco Arabesco$, uma nova edição, corrigida e enriquecida, de uma actualidade gritante. Cinco anos depois das “primaveras árabes!

– Cinco anos são passados desde as chamadas “primaveras árabes”. O balanço é não muito satisfatório, em muitos dos países envolvidos é mesmo catastrófico. Porquê, em sua opinião?

– “Não muito satisfatório”, diz? Estas perturbações maiores que o pensamento ocidental precipitada e falaciosamente baptizou como “primaveras” não geraram senão o caos, a morte, a raiva, o exílio e a desolação em vários países árabes. Seria necessário talvez perguntar aos cidadãos dos países árabes “primaverados” se a situação desastrosa em que eles hoje vivem pode ser qualificada de primaveril.

Os dados são eloquentes. Um estudo recente mostrou que esta funesta estação causou, em cinco anos, mais de 1 milhão e 400 mil vítimas (mortos e feridos), às quais é preciso ajuntar mais de 14 milhões de refugiados. Esta “primavera” custou aos países árabes mais de 833 mil milhões de dólares, dos quais 461 mil milhões em infra-estruturas destruídas e em locais históricos devastados. Por outro lado, a região MENA (Middle East and North Africa) perdeu mais de 103 milhões de turistas, uma verdadeira calamidade para a sua economia.

Na primeira versão do meu livro, “Arabesco americano” (Abril de 2011), pus em evidência a ingerência estrangeira nestas revoltas que tocaram a rua árabe, assim como a falta de espontaneidade desses movimentos. Antes destes acontecimentos os países árabes estavam num estado efectiva de decrepitude: ausência de alternativa política, desemprego elevado, democracia embrionária, uma vida má, direitos fundamentais não respeitados, falta de liberdade de expressão, corrupção a todos os níveis, nepotismo, fuga de cérebros, etc.. Tudo “terreno fértil” para a desestabilização. Mas embora as reivindicações da rua árabe sejam reais, as pesquisas realizadas mostraram que os jovens manifestantes e ciberactivistas árabes eram formados e financiados por organismos americanos especializados na “exportação” da democracia, tais como a USAID, a NED, a Freedom House ou a Open Society do multimilionário George Soros. E tudo isso antes da imolação pelo fogo de Mohamed Bouazizi.

Esses manifestantes, que paralisaram as cidades árabes e que expulsaram os velhos autocratas árabes instalados no poder há decénios, representavam uma juventude cheia de arrebatamento e de promessas.

Uma juventude instruída, manejando com brio as técnicas da resistência não-violenta e com slogans incisivos. Essas mesmas técnicas que foram teorizadas pelo filósofo americano Gene Sharp e postas em prática pelos activistas sérvios do Otpor nas revoluções coloridas do Leste da Europa. Técnicas ensinadas aos jovens manifestantes árabes pelos fundadores do Otpor, no seu centro CANVAS (Center for Applied Non Violent Action and Strategies), especialmente concebido para formação de dissidentes.

Uma juventude viciada em novas tecnologias, cujos líderes foram seleccionados, formados, organizados em rede, e apoiados pelos gigantes americanos da Net por intermédio de organismos americanos como a AYM (Alliance of Youth Movements).

Mas, tal como os activistas das “revoluções coloridas” [1], os ciberdissidentes árabes foram treinados apenas para decapitar os regimes. Eles são “comandados” – provavelmente sem o saberem – para levar a cabo a queda do topo da pirâmide do poder. Mas não têm nenhuma interferência na marcha dos acontecimentos que se seguem depois de os autocratas serem expulsos e provocarem o vazio no poder. Não têm nenhuma aptidão política para concretizar a transição democrática que deveria seguir-se a essa mudança maior.

Num artigo sobre as “revoluções coloridas”, escrito em 2007 pelo jornalista Hernando Calvo Ospina nas colunas do Le Monde Diplomatique, pode ler-se: “A distância entre governantes e governados facilita a tarefa da NED [2] e da sua rede de organizações, que fabricam milhares de ‘dissidentes’ graças aos dólares e à propaganda. Uma vez alcançada a mudança, a maior parte desses ‘dissidentes’ e das suas organizações de todo o género, desaparecem da circulação, sem honra nem glória”.

Assim, quando o papel atribuído aos ciberactivistas termina, são as forças políticas locais, contrárias a qualquer mudança profunda, que ocupam o vazio criado pelo desaparecimento do antigo poder. No caso da Tunísia e do Egipto, foram os movimentos islamistas que, num primeiro momento, aproveitaram a situação, evidentemente ajudados pelos seus aliados, como os Estados Unidos, certos países ocidentais e árabes e a Turquia, que devia servir de modelo.

É claro que esta “primavera” não tem nada a ver com os slogans corajosamente entoados pelos jovens ciberactivistas nas ruas árabes e o abuso da palavra democracia não passa de uma armadilha. De facto, como não colocar sérias interrogações sobre esta “primavera” quando se sabe que os únicos países que sofreram esta estação foram repúblicas? Será por mero acaso que nenhuma monarquia árabe tenha sido atingida por este tsunami “primaveril”, como se esses países fossem santuários da democracia, da liberdade e dos direitos humanos?

A única tentativa de sublevação anti-monárquica, a do Bahrein, foi violentamente sufocada pela colaboração militar do Conselho de Cooperação do Golfo (CCG), o silêncio cúmplice dos media dominantes e a conivência de certos políticos, sempre tão loquazes quando acontecimentos análogos tocaram certas repúblicas árabes.

Estas “primaveras” visam desestabilizar países árabes bem identificados num quadro geopolítico muito mais vasto, certamente o “Grande Médio Oriente”. Esta doutrina preconiza a reformulação das fronteiras de uma região geográfica reagrupando os países árabes e certos países da vizinhança, pondo assim fim às fronteiras herdadas dos acordos Sykes-Picot. Embora lançado sob a liderança do presidente G. W. Bush e dos seus falcões neoconservadores, este projecto inspira-se numa ideia teorizada em 1982 por Oded Yinon, um alto funcionário do ministério dos Negócios Estrangeiros israelita. O “Plano Yinon”, como é originalmente chamado, tinha o objectivo de “desfazer todos os estados árabes existentes e reorganizar o conjunto da região em pequenas entidades frágeis, maleáveis e incapazes de enfrentar os israelitas”.

E essa divisão está infelizmente em curso…

– Neste quadro, ainda assim a Tunísia é uma excepção. Como explica isso?

– Comparativamente com a Líbia, a Síria ou o Iémen, a situação na Tunísia pode parecer interessante. Mas de facto a Tunísia não representa um modelo conseguido como nos querem fazer crer os media dominantes. E não é o Prémio Nobel da Paz recentemente outorgado à Tunísia que muda o que quer que seja. Quando se vê a quem foi atribuído nestes últimos anos, pergunta-se para que serve este prémio. E os tunisinos, que vivem há cinco anos a “primaverização” do seu país, conhecem bem este assunto. Comentando este quinto aniversário, alguns bloggers não estiveram com meias medidas. “Único país democrático do Magrebe+Prémio Nobel, tudo o resto é pior do que o período ZABA (Zine el-Abidine Ben Ali)”. Ou então, com uma ponta de humor: “Injustiça social, tortura, impunidade, estamos nas tintas, temos o Prémio Nobel”.

Numa recente entrevista ao Figaro, um meu amigo tunisino, o filósofo Mezri Haddad, declarou: “Em toda a parte – incluindo na Tunísia, que se apresenta como o paradigma revolucionário bom, e o país a que se atribuiu o Prémio Nobel da Paz em vez de perdoar a dívida externa que se tornou vertiginosa em menos de cinco anos e apoiar a sua economia hoje agonizante – a ‘Primavera árabe’ destruiu mais do que construiu”. Antes de acrescentar: “Depois de 2011, a Tunísia tornou-se o primeiro país exportador de mão-de-obra islâmica-terrorista tanto para a Líbia como para a Síria. Os relatórios das Nações Unidas são esmagadores para o tunisino que sou. O autor do último atentado suicida em Zliten, na Líbia, é um tunisino, como o que atacou a mesquita de Valência ou o que acaba de ser abatido diante do comissariado de polícia do 18.º distrito de Paris”.

Com efeito, a Tunísia ainda é, de longe, o maior fornecedor de jihadistas do Estado Islâmico na Síria. Triste recorde para um país que quer passar pela excepção que justifica a terminologia primaveril. E tudo isso sem contar os assassínios políticos, os atentados terroristas cegos que enlutaram o país e as sórdidas histórias de “jihad al-nikah”, popularizada pelos jovens tunisinos radicalizados.

E também não será a mudança da família do Goncourt para o Museu do Bardo, ainda marcado pelos estigmas do atentado de 18 de Março de 2015, que dará à Tunísia o rótulo de um país que conseguiu a sua transição democrática. Este “empurrão” francês não apagará de maneira nenhuma o lapso da ministra francesa Michèle Alliot-Marie que ofereceu o saber-fazer francês à polícia de Ben Ali para “resolver situações securitárias” e pôr fim à impertinência dos manifestantes que tinham invadido a Avenida Bourguiba.

Estes manifestantes que arvoravam a sua juventude como bandeira de um futuro radioso, o que pensam da idade dos “dinossauros políticos” actuais depois de terem afastado o presidente Ben Ali? Vejam só: Moncef Marzouki (71 anos), Rached Ghannouchi (75 anos) e, sobretudo, o presidente actual, Béji Caid Essebsi (90 anos).

Podem aqueles manifestantes acreditar realmente que uma revolta fundamentalmente jovem, qualificada de “facebookiana”, possa ser representada por gerontocratas, velhos caciques de regimes odiados, islamistas belicosos ou pelos que confundem o interesse do país com o interesse supranacional, da sua confraria?

Pensavam eles que um dia uma lei eleitoral seria aprovada para reabilitar os antigos apoiantes de Ben Ali, contra quem combateram com determinação?

Teriam eles imaginado que, cinco anos depois da partida de Ben Ali, um jovem diplomado tunisino, Ridha Yahyaoui, se mataria em Kasserine para protestar contra o favoritismo na admissão para um emprego, flagelo que eles tinham denunciado e contra o qual se tinham batido? E que os distúrbios que se seguiram a este drama seriam tão duramente reprimidos?

O que houve de tão positivo nesta “Primavera” tunisina se, cinco anos passados, Yahyaoui pelas mesmas razões imita Bouazizi?

– Na sua opinião que diferenças há nas realidades actuais de países como a Síria ou a Líbia, se tivermos em conta que este último país tanto diz à Tunísia, dada a sua proximidade?

– A guerra civil que devasta actualmente a Síria tem curiosas similitudes com a que prevaleceu na Líbia: a) o epicentro inicial da revolta síria não se encontrava na capital mas numa região fronteiriça (contrariamente ao que aconteceu na Tunísia e no Egipto); b) uma “nova antiga” bandeira apareceu com estandarte dos insurrectos; c) a fase não-violenta da revolta foi muito curta; d) a implicação militar estrangeira (directa ou indirecta) rapidamente transformou os tumultos não-violentos numa sangrenta guerra civil. Com efeito, quando a teoria de Gene Sharp [3] não funciona e os ensinamentos da CANVAS não dão frutos, como nos casos da Líbia e da Síria, as manifestações transformam-se muito rapidamente numa guerra civil. Esta metamorfose ocorre graças a uma ostensiva ingerência estrangeira dos países antes referidos, através da NATO no caso da Líbia, ou de coligações heteróclitas como sucedeu na Síria).

Assim, ajudados pelos seus aliados árabes e regionais, os países ocidentais podem passar, sem quaisquer problemas de consciência, duma abordagem não-violenta à Gene Sharp a uma guerra mortífera e sangrenta onde correm rios de sangue árabe.

A efémera fase sharpiana de manifestações populares foi mesmo utilizada para justificar a intervenção militar da NATO na Líbia ou da coligação anti-Bachar na Síria. A resolução 1973 da ONU que permitiu a destruição da Líbia foi justificada pela falsa acusação que as forças leais a Kadhafi tinham feito entre a população civil, pelo menos 6.000 mortos. Na verdade, numerosos países entenderam que os Estados Unidos, a França, a Grã-Bretanha e seus aliados deturparam e abusaram desta resolução permitindo à NATO violar o mandato do Conselho de Segurança. Tendo em conta «a lição da Resolução 1973» países como a Rússia e a China opõem-se hoje a uma resolução das Nações Unidas de condenação da Síria ou do seu presidente, Bachar al-Assad. Se não fosse isso, os media de dominantes de todo o mundo ter-nos-iam mostrado imagens do presidente Bachar com o coração ou a cabeça arrancados pelos especialistas jihadistas no assunto que pululam na Síria graças à activa colaboração dos ocidentais e dos seus aliados.

Acrescente-se que o estudo dos e-mails da senhora Hillary Clinton mostrou que as motivações para eliminar Kadhafi nada tinham a ver com qualquer democratização da Líbia, mas sim com interesses estratégicos, económicos, políticos, e do ouro de um tesouro famoso. O mesmo se pode dizer em relação ao presidente sírio.

É também interessante notar que investigações muito sérias realizadas por especialistas americanos mostraram que a guerra na Líbia não era necessária, que ela podia ter sido evitada se essa fosse a vontade dos Estados Unidos. Mostraram também que a administração americana possibilitou o fornecimento de armas e apoio militar a grupos ligados à Al-Qaida.

Por outro lado, o contra-almirante americano Charles R. Kubic, na reforma, revelou que Kadhafi estava disposto a abandonar a Líbia e permitir o estabelecimento de um governo de transição, sob duas condições: assegurar que após a sua saída permanecesse uma força militar para expulsar a Al-Qaida; e a concessão de um livre-trânsito e o levantamento das sanções contra ele, a sua família e os seus colaboradores mais próximos.

Por seu turno, o antigo presidente da Finlândia (1994-2000) e Prémio Nobel da Paz (2008), Martti Ahtisaari, disse ter sido mandatado pela administração russa, no começo do ano de 2012, para encontrar uma solução pacífica para o conflito sírio.

O plano da resolução do conflito sírio proposto aos representantes dos cinco países membros permanentes do Conselho de Segurança das Nações Unidas compreendia três pontos:
1) não armar a oposição;

2) organizar o diálogo entre a oposição e Bachar al-Assad;

3) permitir uma retirada digna de Bachar al-Assad.

Segundo Marti Ahtisaari, nada foi feito após a apresentação desta proposta aos representantes americano, britânico e francês.

Parece claro que o objectivo desta “Primavera” não tem nada a ver com a democracia e os direitos humanos na Líbia e na Síria ou Médio Oriente e Norte de África, mas sim com a eliminação física dos presidentes Kadhafi e Bachar al-Assad, que permite destruir estes dois países, liquidar milhares de árabes, e financiar jihadistas comedores de corações e degoladores.

Nos casos líbio e sírio, o que chamam “primaveras” são exemplos pedagógicos de guerras civis fomentadas a partir do estrangeiro sob a capa de direitos humanos e humanismo.

Actualmente, estes dois países são terras de instabilidade geopolítica, covis de jihadistas daechianos abertamente financiados por países ocidentais, países árabes e potências regionais [3].

No quadro desta forte turbulência política e de agressiva ingerência estrangeira, a Argélia foi e continua a ser um dos principais alvos. Lembremos que jovens argelinos também participaram em formações de sérvios da CANVAS e que numerosos países apostaram na “primaverização” (violenta ou não) da Argélia. As más recordações do decénio negro e a efemeridade da CNCD (Coordenação Nacional para a Mudança e a Democracia) forçaram uma decisão diferente.

Hoje, a situação líbia é evidentemente muito preocupante para a segurança e estabilidade da Argélia. Alguns observadores calculam que haja 300 grupos de milícias armadas na Líbia e notam que elas estão fortemente ligadas às suas congéneres tunisinas. De facto, segundo um relatório da Comissão de Negócios Estrangeiros da Assembleia Nacional Francesa, datado de Novembro de 2015, “o conjunto de atentados recentes na Tunísia foram organizados e planificados a partir da Líbia”.

Contrariamente às declarações belicosas e mal-intencionadas de Nicolas Sarkozy – um dos maiores responsáveis pela destruição da Líbia –, deveria ser a Argélia a lamentar-se da sua localização geográfica fronteiriça com a Tunísia e a Líbia. Isso é tanto mais verdade quanto é certo que a colaboração entre o Daech na Líbia e os movimentos terroristas do Sahel é cada vez mais evidente, o que dá ainda mais razões à Argélia para tornar seguro o sul do país.

Vê-se bemque mesmo que a Argélia não tenha sido tocada directamente por esta lúgubre estação, a “primaverização” a que foram sujeitos os seus vizinhos coloca-lhe enormes desafios.

– No seu livro Arabesque$, de que acaba de aparecer uma nova edição revista e enriquecida, a tese que defende é a de uma grande implicação e de uma grande responsabilidade dos Estados Unidos nas “primaveras árabes”, um envolvimento norte-americano que classifica, nada mais, nada menos, como operações de desestabilização de Estados e de regimes instalados no mundo árabe. Até que ponto continua a defender esta análise?

– Quando a primeira versão do meu livro intitulado Arabesco americano, foi publicada, em Abril de 2011, ela foi acolhida com muito cepticismo porque a tese que ali era desenvolvida opunha-se à euforia “primaveril” dominante e introduzia uma nota discordante no unanimismo inebriante. Esta benevolência face a uma “revolução” árabe imaculada, orquestrada por uma bela juventude instruída e impetuosa, não devia em nenhuma circunstância ser manchada por acusações que, de toda a maneira, não podiam ser senão caluniosas. Este discurso foi repetido pelos media dominantes e por numerosos especialistas “catódicos”, dos quais subsistem ainda alguns espécimes recalcitrantes.

É preciso reconhecer que opor-se ao romantismo revolucionário no seu auge, algumas semanas apenas depois da queda de Ben Ali e de Moubarak, relevava certamente de uma inconsciência temerária.

Contudo, a tese apresentada neste livro – que inclui mais de 260 referências facilmente comprováveis – foi meticulosamente elaborada graças à análise de numerosos livros, documentos oficiais, relatórios de actividades, telegramas Wikileaks, etc..

É claro que não foram os Estados Unidos que provocaram a “Primavera” árabe. Como foi explicado antes, a situação política e sócio-económica dos países árabes é um terreno fértil para a dissidência e a revolta. Contudo, a implicação americana no processo não é inócua, longe disso. Confirmam-no o papel primordial dos organismos especializados na “exportação” da democracia e maioritariamente subvencionados pelo governo americano, as formações teóricas e práticas sobre a resistência não-violenta dadas pela CANVAS, a constituição de uma “liga árabe da Net” dominando as novas tecnologias, a elaboração de ferramentas de navegação anónima distribuídas gratuitamente aos ciberactivistas, a estreita colaboração entre os ciberdissidentes e as embaixadas norte-americanas nos países árabes, as enormes somas investidas, o envolvimento militar e as manobras diplomáticas a alto nível. E como a política externa dos Estados Unidos nunca foi um modelo de filantropia, é preciso reconhecer a evidência de que os americanos influenciaram fortemente o curso dos acontecimentos. Não se pode esquecer que todas estas acções foram empreendidas durante anos, antes do começo da “Primavera” árabe.

À medida que o tempo avançava, a natureza pérfida destas “revoluções” foi revelada, as línguas soltaram-se e novos documentos apareceram. Nada do a partir de então apareceu desmente a minha tese, pelo contrário ela foi amplamente confirmada. Foi isso que justificou a redacção de uma nova versão do livro, intitulada Arabesco$ – Inquérito sobre o papel dos Estados Unidos nas revoltas árabes, editada em Setembro de 2015. Em comparação com a obra anterior, o novo livro inclui mais de 600 documentos e o número de páginas quase triplicou. Entre outros documentos explícitos, citemos, por exemplo, o estudo realizado em 2008 pela corporação RAND (gabinete de estudos do Exército dos Estados Unidos), que serviu de fundamento à política americana de “exportação” da democracia para os países árabes, baseada na formação, apoio e organização em rede de activistas provenientes desses países.

Um outro documento merece também ser mencionado. Trata-se de um relatório saído do Departamento de Estado americano, redigido em 2010 e obtido em 2014 graças à lei para a liberdade de informação.

Esse relatório explica claramente “a estrutura elaborada de programas do Departamento de Estado visando criar organizações da ‘sociedade civil’, em particular as organizações não-governamentais (ONG), para modificar a política interna dos países seleccionados a favor da política estrangeira dos Estados Unidos e dos seus objectivos de segurança nacional”. Utilizando uma linguagem diplomática, o documento precisa que o objectivo é “a promoção e a monitorização de mudanças políticas nos países alvos”.

A implicação dos Estados Unidos na “Primavera” árabe não é uma especulação intelectual. A sua existência é abertamente reconhecida pela própria administração americana. É o que explico pormenorizadamente no livro Arabesco$.

– Partilha a ideia de que as “primaveras árabes” acabaram? Que cenários possíveis prevê, sobretudo para a Líbia, país em que os actores não conseguem entender-se sobre uma solução política promovida por uma já prevista intervenção militar europeia?

– Que se diga: a “Primavera” árabe nunca foi uma Primavera, se tivermos em conta as consequências desastrosas para as populações, nem intrinsecamente árabe, porque os movimentos de contestação foram infiltrados decisivamente por organismos estrangeiros, nomeadamente estadounidenses.

O processo de “primaverização” do mundo árabe chega ao fim? Certamente.

Os povos árabes não são cegos. Os exemplos da selvagem destruição da Líbia, da Síria e do Iémen são suficientes para convencer mesmo os mais renitentes.

O mundo árabe tem imperativamente necessidade de fazer enormes transformações em diferentes domínios da sociedade; político, sócio-económico, cultural, de liberdade de expressão, dos direitos humanos, etc.. Mas para realizar estas mudanças é preciso destrui os países e fomentar o ressurgimento de práticas medievais, de semear a morte, o ódio e a desolação? É evidente que não.

Por outro lado, estas mudanças de forma alguma devem obedecer ou beneficiar agendas estrangeiras; os países árabes não devem agir de modo que as suas terras se tornem o campo de jogo das potências, no qual se travem guerras “low cost”, onde só sangue é derramado.

É o caso da Síria, na medida em que este país é actualmente o cenário de confrontos (directos e indirectos) de numerosos beligerantes, cada um tendo as suas próprias agendas e ambições, distantes das dos sírios.

No que diz respeito à Líbia, qualquer nova intervenção militar ocidental neste país corre o risco de provocar consequências indesejáveis no território argelino. É por esta razão que a Argélia se opõe firmemente a tal eventualidade e não exclui nenhum esforço para encontrar uma solução política para o conflito e fazer sentar-se à volta da mesma mesa as diferentes facções.

Apenas permitindo aos cidadãos de um país discutir em conjunto, de boa-fé, tendo em conta os seus interesses nacionais e não os de outros países, o mundo árabe conseguirá sair da situação de decadência para onde foi empurrado.

Notas do tradutor:
[1] Movimentos ocorridos a partir de 2000 em alguns países saídos do desmembramento da União Soviética e que em geral substituíram os regimes pró-russos por governos pró-ocidentais. Como por exemplo a “Revolução Rosa”, na Geórgia (2003), a “Revolução Laranja”, na Ucrânia (2004) ou a “Revolução das Tulipas”, no Quirguistão (2005). Esses e outros golpes de estado, mais contra-revoluções do que revoluções, quer tenham tido êxito ou não, foram apoiados pelos Estados Unidos e seus aliados locais.
[2] NED – National Endowment for Democracy, organização privada norte-americana, criada em 1983 (entre outros, pelo presidente Ronald Reagan), com o apoio financeiro do Congresso dos EUA e de agências governamentais como a USAID, com o objectivo de “fortalecer as instituições democráticas em todo o mundo”. A NED é suspeita de ser um instrumento da CIA, não de promoção mas de subversão da democracia, e para tal financia organizações não-governamentais (ONG) e grupos “pró-democracia” em mais de 90 países.
[3] Sharp, importa recordar, é um académico norte-americano, acusado de estar ligado à CIA, autor de um muito difundido livro (Da ditadura à democracia) sobre as técnicas e os meios “pacíficos” de se chegar à “democracia”, um autêntico manual de golpes de estado suaves, cujas recomendações foram seguidas, com êxito, em várias “revoluções coloridas”, e com menos sucesso noutros casos, como, recentemente, em Hong Kong ou em Angola…
[4] Quando insiste nas “potências regionais”, o autor refere-se provavelmente a Israel, que ocupa território sírio desde 1967 e é o grande aliado dos Estados Unidos no Médio Oriente, e ao Irão, país que, não sendo árabe, é de maioria muçulmana xiita e que apoia política e militarmente o regime sírio.

* Nordine Azzouz é director do diário argelino Reporters

** odiario.info publicou já um texto de Ahmed Bensaada em:

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FONTE: ODiario.Info